Soy un animal nocturno... y cuando todos se han acostado he rebuscando en los cajones y he acabado aquí, me he dado cuenta que hace casi un año que no escribía, ni tan siquiera di la bienvenida al 2012 que ya se esta despidiendo... ¿será que solo tengo ganas de escribir en otoño? no lo se.
Lo que se, es que ya no necesito desahogarme continuamente en una hoja en blanco, "tout est calme" y eso es por ti... Este ya no es mi rincón seguro al margen del mundo donde gritar lo que no me atrevo a decir, ahora mi rincón seguro eres tú, así que quizás sea tiempo de cambiar la perspectiva de este lugar, para no dejarlo morir. Y como se que esto lo vas a leer... gracias.
"Y las calles se vuelven playas si tú las andas... todo es por ti."
Son los días como este los que me impulsaron ha abrir este pequeño mundo anónimo. Los días solitarios que decido vivir en blanco y negro o viajar a los 50, 60... los días donde millones de personas se unen a una danza de felicidad y familiaridad, y yo con mi nulo sentido del ritmo para ese tipo de celebraciones me quedo mirando desde fuera, desde otra época o lugar. Bebiendo y bailando hasta el amanecer, mirar a la luna...o quizás a una farola, y debajo sentir que me besas y juntos arder hasta que todo pase.
"Era uno de esos días en que está a punto de nevar... y
el aire está cargado de electricidad. Casi puedes oírla ¿verdad? Y esa bolsa está bailando...
conmigo... como un niño pidiéndome jugar, durante quince minutos. Es el día en
que descubrí que existe vida bajo las cosas y una fuerza increíblemente
benévola que me hacia comprender que no hay razón para tener miedo jamás. El
vídeo es una triste excusa lo sé pero me ayuda a recordarlo, necesito
recordarlo a veces hay tantísima belleza en el mundo que siento que no lo
aguanto y que mi corazón se está derrumbando..."
Por la mañana, niebla. Por la tarde, tormenta. Sin duda el otoño reaparece con ganas (al fin y al cabo este año no se llego a ir del todo). El otoño es la estación de la melancolía, de los parques llenos de hojas secas, de mil colores cálidos, de recorrer el Parque de San Francisco con el crujir de las mismas, ese olor a castañas que lo impregna todo y muy abrazada a ti. Es la época de sacar el abrigo, el gorro y los guantes... época de paraguas mojados por doquier, de vaho en los cristales, la gente esta triste, pero es una tristeza bonita... tardes de cafés a media luz o de chocolate caliente...
Una sola puerta de tres, abierta.
Una sola puerta.
Enfrente, la montaña.
Pasa la nube inmensa;
toda suya... todo suyo.
Huracanes de vientos;
lluvia andante semiparalela
y en todo el monte funerales alegres, naturales,
de hojas muertas.
Los cabellos terráqueos danzan todos iguales
al son de trompetas invisibles que vienen de los mares.
Llegó el otoño; llegó la muerte...
¡Mas no para todos!
Hoy morirán hojas y animales.
Mas no morirán para siempre y, en su transformación de
mañana
darán
con más calor
a la tierra,
de su muerte,
pasado mañana,
brotes de esperanza.
Y yo no he muerto.
Me alegro de la lluvia
y me alegro del viento.
Si tengo frío, me caliento;
si tengo miedo, ¡Que no lo tengo!,
susurro y pienso...
y para mañana
ya me he comido mi pequeña ración de esperanza.
Una sola puerta de tres, abierta.
Una sola puerta inmensa.
Poema de Manolo Chinato ~ Música Extrechinato y tú
Hay momentos en la vida en que nos enfrentamos a pruebas, problemas, discusiones que nos hacen daño... estoy en un momento extraño de mi vida y pese a haberme asustado y desconfiado de mi misma... he llegado a ese punto donde miro atrás y veo que todo lo que estoy viviendo se parece demasiado a lo que ya viví... más y más de lo mismo... una explosión... llanto, observación y reconocimiento de la realidad.
He vuelto al punto de partida, donde una vez mas me levanto sin mirar al suelo. Tengo algo, algo importante, algo de lo que algunas personas carecen y algo que otros no ven en mi aunque este presente.
Se quien soy y se de lo que soy capaz y dicho sea de paso... duermo sin remordimientos.
Soy vulnerable, pero también soy fuerte... de recuperación rápida.
Un simple cambio de prioridades y a seguir caminando... Aquí dejo una cita de uno de mis libros preferidos: "El Principito"
"¿Y de qué te sirve poseer las estrellas? - Me sirve para ser rico. - ¿Y de qué te sirve ser rico? - Me sirve para comprar más estrellas"
